AMARILLO COW BOY IRRESISTIBLE
Hoy es sábado 22 de enero. Acabo de dejar el libro que estoy leyendo de Ella Cooper” Irresistible Touch”, porque veo al novio de mi hermana “Cachalunas” que viene a buscarla vestido de cow boy.
Su estampa nunca se me olvidará. Su cara tiene un color amarillo. De qué manera se ha ofrecido a besarla, que me ha hecho recordar los besos que les daban los vaqueros a sus guapas chicas en las películas del Oeste americano.
Nunca se me va a olvidar ese beso: mi hermana puesta la mano en las narices y él intentando acercar sus labios a los de ella, apretándola contra su vientre.
Porque, de repente, sus tripas resonaron tan reciamente que sus sonidos eran de cagalera pura. Yo pensé que él hacía burla de mi hermana, y cogí una escoba para darle en la cabeza con el palo
Antes de que llegara a darle, él se desprendió de mi hermana apretándose con las dos manos el vientre e inclinándose como si se fuera a cagar. ¡Se cagó por la pata abajo¡ ¡Maldito¡
Mi hermana le llevó al baño, cogió un pantalón y calzoncillo míos para que se les pusiera, una vez que se hubiera duchado.
Mi hermana le dijo antes de cerrar la puerta:
-Cachalunas, ahora en vez de llamarte por tu nombre te llamaremos Culo Roto.
-Cachalunas exclamó:
-No me hace gracia, Lupe. En hora mala me vino la cagalera. No creo que por esto tuviera que sufrir un palo de tu hermano en la cabeza. A ver si tú no has tenido retortijones de estómago. Recuerda aquel día que hacíamos sexo en la alcoba de tus padres y tú te cagaste antes de llagar los dos al Orgasmo. Recuerda que te dije:
-Lupita, tan en hora mala supiste tú cagar. ¡Vaya lluvia de mierda¡
-Sí, Cachalunas, mi Cow Boy amarillo. Y yo te respondo ahora:
-¿Y dónde hallaste tu ser bueno cagarte en casa de la tía Cagalera, mi madre? No creo que mis padres consientan en darte mi mano para el casamiento.
Nuestra madre vino de hacer la compra del Mercado de San Isidro, en Carabanchel Bajo. Mi hermana le contó, yo presente, todo lo sucedido. Le dijo, también, que su novio estaba en el baño porque se había cagado por la pata abajo. La madre nos dijo:
-Ya te dije yo, hija mía, que este novio tuyo ha tenido y tiene algún secreto; y algo le debe pasar pues tiene la cara siempre amarilla y, como bien sabes, porque os lo he dicho mil veces, los que tienen la cara amarilla son como los pollos amarillos que están malos por estar enfermos.
Se escuchó un pedorrear tremendo que venía del baño. Yo exclamé:
-¡Qué pedorreo de mierda nos acaba de dar el compañero Cow Boy amarillo¡
Nuestra madre le dijo a mi hermana:
-Hija mía, el pedo y la cagalera deciden. Tú sabrás lo que haces.
-Madre, contestó mi hermana, es que Cachalunas, ahora mi Cow Boy Culo Roto, va a llegar a ser Alcalde de Madrid, que me lo ha dicho.
-Daniel de Culla